Tuesday, June 06, 2006

EL VEREDICTO

La cuenta regresiva para Alemania 2006 es cada vez más corta, al igual que las distancias en el fútbol. A escasas horas de que los teutones inauguren su copa frente a Costa Rica, hacer un pronóstico resulta peligroso. Es cierto que hay selecciones cuyo nombre es presagio de buenos resultados, como Italia, Brasil y el propio país anfitrión. Aún así, hay una gran camada de equipos novatos que podrían dar más de zarpazo a los llamados “grandes”. Empezando por los europeos están, la Ucrania de Shevchenko y la ahora dividida Serbia y Montenegro, resquicio de una Yugoslavia de gran tradición mundialista.
Luego están los equipos africanos, de los que se puede esperar todo y nada a la vez. No es ninguna casualidad que la velocidad y técnica en los jugadores del continente negro los haya llevado a las principales ligas del mundo.

Ajenos a lo que hagan otras naciones, México vive, más que nunca, un momento crítico para su historia futbolera. Los medios se han encargado de mandar al tricolor a la final, aunque su juego todavía deje amplias dudas. ¿Será esta selección la que nos llene de satisfacciones? ¿O tendremos en frente un destino similar al del mundial de Argentina, en 1978? La promesa del quinto partido, es eso, una promesa. No sabemos si habrá de cumplirse, o si se quebrará a pesar de nuestro ímpetu.

México se enfrenta a la cuenta regresiva hacia la duda.

Sara Herrera Landeros
La Barra
"Por 90 minutos todos somos iguales."